El supermodelo David Gandy protagoniza campañas en compañía de Dora, su hija no humana.
David Gandy (1980) es un icono masculino. Desde que el fotógrafo Mario Testino lo mostró como un adonis, eso fue en la isla de Capri y para el perfume ‘Light Blue’ de Dolce & Gabbana, Gandy tiene enamorado al mundo entero. Le gustan los perros y me alegra ver sus trabajos con Dora, su perra rescatada. Se involucra en causas benéficas, es embajador de Battersea Dogs and Cats Home; la protectora donde adoptó a Dora. Además, el supermodelo británico es empresario y un apasionado de los coches clásicos.
Este año pudimos ver a Gandy con Dora en la campaña de Aspinal of London, firma de accesorios de lujo; una institución de la quintaescencia británica. Y, desde la semana pasada, estos inseparables amigos vuelven a aparecer juntos en la nueva publicidad de Mango Men.
El casting no podía ser mejor y el storytelling es: ¡muy atractivo! Para la concientización social, resulta poderosa la imagen creada por Mango. Entre los mensajes que transmite, vemos a un hombre feliz con su fiel compañera y esta historia de amistad comunica algo importante para nuestra sociedad. Campañas publicitarias como esta, que se esfuerzan por aportar algo, más allá de los productos que ponen a la venta, son las que me atraen.
Asimismo, el personaje representado en el spot conduce un Porsche. Conociéndose la pasión que tienen los caballeros con poder adquisitivo por los coches clásicos, este recurso brinda otro valor añadido a la propuesta de la línea masculina de Mango. En esta atmósfera ideal, humana, con un buena percha y algunos looks acertados, el estilismo a veces parece hasta provenir de una buena casa. Obviamente, como se trata de una marca low cost, no son prendas de cashmere. Por todo ello, dudo que, hombres con la sensibilidad y el poder adquisitivo representado lleguen a pisar espacios mainstream. De todos modos, el anuncio llega al corazón.
Texto: Christian Oliva-Vélez
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