Trabajando en el made in Spain, en una posible colección para perros, pasamos la noche en el Hotel Fuerte Grazalema. Recorrimos la sierra y conocimos sus animales.
El made in Spain, su artesanado y calidades, se vive de cerca en Ubrique. Como había que meditar lo que vimos ayer con Laura Domínguez, hemos cogido el día para analizar todos los puntos de nuestra posible colección de accesorios para perro. Mientras tanto, el room service del hotel Fuerte Grazalema me trajo el desayuno que pedí. Ha dejado de llover y Eros está jugando en el jardín de nuestra suite.
Más tarde, con un Land Rover Defender, nos fuimos hasta el Tambor del Llano. Esta finca inaugura un albergue con baños individuales y restaurante en un entorno rural. La propuesta es atractiva y diferente a lo que hay en toda la región. Habrá workshop de yoga y otras temáticas. Atravesando campo abierto por unos senderos, conocimos sus caballos y ovejas. He conseguido que Eros no les ladrara. Hay varios cabras, todas están disfrutando de la buena vida. Después, nos fuimos con el coche a seguir descubriendo la identidad de la Provincia de Cádiz, sus Pueblos Blancos.
Ruta de los Pueblos Blancos
Por carreteras serpenteantes, franqueadas por encinas, alcornoques, pinsapos (pino Abies Alba) y vigilados por macizos y majestuosos buitres leonados, llegamos a Grazalema (5,2 km). En este pueblo serrano e histórico, cubierto de cal blanca, un puñado de casas están decoradas con geranios y orquídeas. Las rejas y puertas son antiguas. En esta pintoresca miniatura de pueblo, degusté los quesos de leche cruda, tradicionales y artesanales, de La Abuela Agustina. Solo me faltó comprar lana, su calidad es famosa desde el siglo XVII. Conocí la lana de merino de aquí, la toqué y me encantó. Sin lugar a dudas, le hablaré de ello a mi posible socia, Laura Domínguez.
Barrotes de hierro, tabernas y acantilados
Con este legado de sabor de pueblo y campo, continuamos hasta Zahara (18 km) y Ronda (32 km). Después de mirar el Puente Nuevo sobre la Garganta del Tajo, comimos mariscos y pescaditos fritos de Málaga en la terraza del restaurante Los Candiles (40 €), frente de la iglesia de Nuestra Señora del Socorro y al lado de la fuente de Hércules (héroe mitológico representado en el escudo de Andalucía). Al volver, en el Parque Natural Sierra de Grazalema, Reserva de la Biosfera por la UNESCO y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), seguía lloviznando. Este Parque presenta el mayor índice pluviométrico de toda la península ibérica. Un chubasquero es una prenda que no debe faltar en el equipaje de cualquier senderista que se acerque por aquí en cualquier época del año.
Estoy tomando un té con una tarta de almendras mientras contemplo las simas de un valle de paredes verticales y disfruto de la paz. Eros duerme sobre la cama que le ha puesto el hotel Fuerte Grazalema. He pedido un osteópata. Acaba de llegar. Los masajes son en mi habitación y me los da José Francisco Sánchez Jiménez (667 556 078, osteópata, 1h/ 30€, Centro El Acebuche. Me sorprendió, es un experto. Después de viajar y caminar tanto, este tipo de terapias son imprescindibles para mí. Encontrar en un lugar recóndito a alguien cualificado ha sido una sorpresa gratificante.
De la Serranía gaditana hasta Ubrique
Renovado, bajamos a Ubrique. Pasamos por el espectacular paisaje de sierras de roca caliza y nos reunimos con Laura Domínguez en la fábrica Dimopel. Me alegró ver que están de aniversario. Los Domínguez llevan más de 25 años apostando por el Made in Spain.
Revisamos los materiales elegidos, todos provienen de los mejores proveedores. La producción de los primeros prototipos se ha puesto en marcha. Definimos los detalles comerciales y el porcentaje benéfico que tendrá cada artículo de la colección.
Nos despedimos de la serranía gaditana con un hasta muy pronto. Los campos de girasoles me tienen maravillado. El amarillo representa la energía de este viaje tan productivo. Con el AVE llegamos a media noche a casa, los dos caímos rendidos en la cama.
Texto y fotos: Christian Oliva-Vélez
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