Durante nuestra residencia temporal en Barcelona paseamos casi siempre por el pavimento diseñado por Antoni Gaudí. Disfruta con tu peludo de este paseo, han comenzado las rebajas.

Ya han empezado las rebajas y recuerdo los panot. Durante un invierno (no muy lejano), con mi familia nos instalamos en un piso alquilado a pocos metros del Paseo de Gracia. Por allí andan ahora los míos, nosotros estamos en Buenos Aires. Como acostumbramos, para no aburrirnos ninguno de los dos, los paseos diarios con Eros son todos diferentes. Entre ellos, hay uno de gran belleza (no por las rebajas). Este escenario de lujo está cubierto por el pavimento de baldosas diseñadas por Antoni Gaudí. El auténtico ‘Parot Gaudí’ (mosaico) tiene temática marina y vegetal. Fue una auténtica revolución en el diseño industrial. Primero, esta composición hexagonal sólo se podía apreciar en la Casa Milà (o La Pedrera) y, desde 2002, viste el paseo de Gracià de Barcelona.

Los panot revisten la acera de la calle más lujosa y limpia de Barcelona donde las bases de los árboles no son profundas, como en la inmensa mayoría de la ciudad. Para Eros y sus amigos pequeños y medianos de cuatro patas, el Paseo de Gracia resulta un recorrido cómodo para levantar la pata. Para evitar el gentío, que alguien se lleve por delante a Eros, evitamos pasar por esta calle durante el día y los sábados (y menos ahora en rebajas).

En el cruce de Passeig de Gràcia y Diagonal se alza el Obelisco de Diagonal; uno de los monumentos más famosos de Barcelona.

Si vais de compras por Paseo de Gracia, en Massimo Dutti, Casa del Libro, Khiel’s y en los locales de las firmas de lujo podrás entrar con tu peludo sin problemas. Para hospedaros, te recomiendo el Mandarin Oriental Barcelona,The One y el hotel Clariso sus apartamentos.  

Texto y fotos: Christian Oliva-Vélez