Con Eros visitamos el Museo Folklórico Noruego, vivimos de cerca un estilo de vida único en el mundo.

Pensando en la naturaleza, en los dioses que veneran los samis y en los vikingos, llegamos a la península de Bygdøy deslizándonos con un ferry por el Fiordo de Oslo. Con la misma Oslo Pass, con la que viajamos, accedimos al  Norsk Folkemuseum. Entré con Eros en una auténtica aldea escandinava. Este museo etnográfico es: ¡muy interesante! Entre abedules y el canto de los pájaros descubrí construcciones tradicionales de madera y de todas las regiones de Noruega. Hay musgo y pastos en los tejados, animales de granja, hombres, mujeres y niños con vestimentas regionales viviendo como en el siglo pasado.

En este museo al aire libre, mi animal sagrado y yo nos sentamos en la escalera de una de las 155 casas. Contemplé el entorno y la iglesia de Gol Stavkirke (año 1200): ¡magnífica! Como guiño a los colores del traje kolt de los samis, me puse un outfit con rojo, amarillo y azul. La atmósfera del Museo Folklórico Noruego está muy bien lograda, imposible no sentirse en un escenario de la serie Vikings. Los nómadas éramos nosotros (yo me dejé la barba), solo faltaban los renos y las auroras boreales.

Cerré los ojos (no lo hice para imaginarme allí con Ragnar Lodbrok). El viento dirigió una orquesta de hojas verdes. Grabé en mi mente aquel instante. Le di agua a Eros y nos perdimos por esta Noruega en miniatura. Ahora puedes hacer clic aquí y descubrir más detalles de nuestro viaje a Oslo.

Camisa DOCKERS Vaqueros PEPE JEANS Zapatillas THE NORT FACE Mochila ECOALF Reloj MONTBLANC Gafas BOSS Arnés y correa MASCOBOUTIQUE

Texto y estilismo: Christian Oliva-Vélez
Fotos: David Suárez Fernández
Agradecimiento especial: Visit Oslo/ Visit Norway