Honrando a los perros, escojo «The Book of the Dogs«, el nuevo libro creado por la británica Pentagram. El título está dirigido a los amantes de los perros de todas las edades. Los autores son Angus Hyland (graduado en el Royal College of Art) y Kendra Wilson (escritora apasionada de la naturaleza). Se trata de un entretenido recorrido por el arte desde el 1700 hasta nuestros días. Es un tributo al mejor amigo del hombre, el perro, que también fue musa de genios. Con ironía británica, los autores nos brindan citas como la del escritor D.H. Lawrence.
Nada más que el amor ha hecho que el perro pierda su salvaje libertad, para convertirse en el sirviente del hombre.
En su introducción confirma que, está claro que los que imponen las cualidades humanas en animales encuentran su cómplice más dispuesto en el perro. Los vestimos, hemos aplacado sus cualidades de lobo y hemos cambiado su color. Afirma que, así es como retratamos a nuestros mejores amigos.
Nos adelanta que, el amor eterno de un perro es, por supuesto, correspondido en sus páginas. Y que, está claro que también hay una dependencia mutua. Es interesante leer la siguiente afirmación «Necesitamos perros, ya que nos ayudan a abrir canales de emoción. En el arte, en la vida, proyectamos nuestras ambiciones, triunfos y ansiedades en los perros y ahora vuelven a por más. Sí, siempre hay una posible llamada subyacente de la naturaleza.».
Comenta que, como símbolos de estatus y bienestar, los perros están presentes en innumerables obras de arte. El compendio incluye obras de amantes de los perros como fueron Lucien Freud, Picasso, Goya, Edgar Degas, Andy Warhol y contemporáneos que los adoran como David Hockney, Todd Young o Constance Bachmann entre otros.
Finaliza resumiendo, The Book of the Dog explora la alternativa de volverse nativo: vivir con los humanos. Asimismo, afirma, nuestra propia contribución a la relación, entre el perro y nosotros, es muy simple: consiste principalmente en alimento y compañía. Sin más, podemos leer, después de todo, la vida de un perro es muy sencilla. Concluye con humor citando al escritor norteamericano James Thurber.
Los perros están obsesionados con ser felices.
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