Después de Navegar, elegí DOC Douro, un palco sobre el río donde el deleite de la belleza y la buena mesa me brindaron plenitud.
Atracamos. En Folgosa, caminamos hasta DOC Douro, el mejor restaurante gastronómico de la región. La cocina del chef Rui Paula gusta también al presidente de Portugal, a Bono (U2) y a la actriz Andie MacDowell entre otras personalidades. Nos sentamos en la terraza, un deck de madera sobre el Duero con vistas panorámicas impresionantes (menú, 100 €; +351 254 858 123; docrestaurante.pt).

Burmester de 10 años de edad.
Por la otra costa, pasó un tren histórico con locomotora de vapor. Pedí un vintage, así se denominan los mejores caldos del valle del Duero. Descorcharon un Burmester de 10 años de edad; proviene de un bodega de Oporto del año 1750. Me sedujo su color dorado, el aroma de frutas maduras, de miel y especias. La crème brûlée de naranjas del Algarve me fascinó. Qué estado de plenitud, la belleza del paisaje, el vino y los postres riquísimos me llenaron de dicha.
- Servilletero.
- Agua mineral embotellada con la firma de Rui Paula.
- Cuchara helada y crujiente.
- Crème brûlée de naranjas del Algarve.
- Sinfonía de chocolates.
- Petits fours.
- Una suma perfecta y pastel típico con frutos del bosque.
Después del café y los petits fours, paseamos por la freguesia (aldea con parroquia). Me pareció que sus habitantes estaban durmiendo la siesta, menos los perros, que salieron a saludar a Eros. En las casas no faltaban huertos, árboles frutales o flores.
- Iglesia Parroquial de Folgosa.
- Lilas.
- Cruz y veleta con forma de gallo.
- Amapolas.
- Huerto.
- Habitante de Folgosa.
- Naranajas y flores de azahar.
- Escalera de piedras.
- Limoneros.
- Margaritas.
- Viñedos del valle.
Dejamos este asombroso destino y regresamos a la ciudad. El ocaso nos esperó, contemplamos Oporto desde Gaia y, después, disfrutamos de una cena estupenda. Compartiré esta nueva crónica la próxima semana.
Texto: Christian Oliva-Vélez
Fotos: David Suárez
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