GreyHounders es española, 100% digital, se inspira en los barrios castizos más cool de Madrid y ayuda a la raza que más sufre en el mundo, el galgo.
GreyHounders nace con vocación solidaria. Sus fundadores comparten el amor por los galgos, de ahí que el nombre de la startup haga un guiño a esta raza de perro. “Greyhound” significa “galgo” y por eso ellos son los “GreyHounders”. En España, miles de galgos son sacrificados y abandonados una vez finalizada la temporada de caza. Sensibilizados con la situación, la firma colabora donando el 1% del beneficio mensual a Galgos del Sol, una de las protectoras que se dedican al rescate de animales no humanos.
Proceso de compra innovador
Marta Frenna, Marco Resina y Juanjo Ruano son los fundadores de GreyHounders. La marca democratiza el acceso al sector de las gafas graduadas con un servicio 100% online. Ofrece calidad a precios muy competitivos (lentes graduadas desde 79 euros). Con su propuesta están apostando por la digitalización del mundo de la óptica. De este modo, toda Europa puede adquirir gafas sin límites geográficos o culturales. Greyhounders se aleja del modelo tradicional de tienda física y facilita la compra de las gafas graduadas sin salir de casa. Su proceso de venta es innovador. Sus clientes se las pueden probar de manera virtual o recibir cuatro monturas diferentes en casa. Cinco días después, una vez hayan elegido la montura, las recogen, fabrican las lentes graduadas en su laboratorio y, lo antes posible, envían las gafas compradas.
Diseño con carácter propio
En cuanto a la creatividad, sus artífices recorrieron el barrio de Ópera pensando en las mujeres que antiguamente acudían al teatro; con sus monóculos con terminación en ojo de gato. Inspirados, lanzaron el modelo Ópera. Lo mismo hicieron con Conde Duque y su extravagancia. También capturaron el momento hipster de Malasaña. Otro de sus diseños evoca la elegancia y formalidad del barrio de Salamanca. También han dedicado monturas a barrios de Barcelona, Valencia y Sevilla. Las Greys llevan lentes orgánicas CR39 monofocales, con tratamientos anti-reflejante y endurecido incluidos. Por 20 euros más se pueden añadir filtros contra la luz azul de los ordenadores.
Sin duda, esta es una propuesta original, a precio competitivo y con empatía hacía el mejor amigo del hombre y de la mujer.
Texto: Christian Oliva-Vélez
Fotos: GreyHounders
Me encanta todo!
Solo que hagan gafas de sol (para los miopes operados) y me tienen como Clienta!!
¡Divina! Gracias por tu comentario.