El Café Savoy es un clásico en Praga. En este espacio de estilo neorrenacentista, sirven con simpatía el mejor chocolate caliente de la ciudad y dulces gloriosos.
El Café Savoy es un elegante local, del año 2004, inspirado en las cafeterías de Viena y París; una institución en la República Checa. The Telegraph lo recomienda entre los 10 mejores establecimientos de la ciudad. Está ubicado en un edificio del año 1893 en el barrio de Malá Strana (Pequeña Ciudad), la parte antigua mejor conservada de Praga. En su elegante y cálido ambiente, el ritual del café permanece impasible al paso del tiempo —lo mismo sucede en Austria—.
Mirando el techo neorrenacentista y las arañas del Café Savoy, me senté. En invierno, nada mejor que, una taza de chocolate caliente; aquí es de Valrhona (el mejor del mundo) y lo sirven acompañado de nata recién montada. Yo, que lo he probado en compañía de Eros, afirmo que, es merecedor de la excelente reputación que tiene. Asimismo, la pastelería fulmina cualquier dieta y su calidad es memorable. Son famosos los vetrnik (profiteroles) y la tarta Savoy. Todo vino acompañado de un zumo natural de mandarina china con gas. Qué placer inolvidable me brindaron los clásicos de esta casa. Así es Praga, ofrece riqueza para los cinco sentidos.
Texto: Christian Oliva-Vélez
Fotos: David Suárez
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